Soy la peor amiga de todas, ahora que estoy tan lejos, realmente me cuesta mucho no extrañarte, pero la verdad es que si te extraño mucho, solo que creo que estoy acostumbrada a no demostrarlo. Nunca he sido buena para decir ni te quieros, ni te amos, ni te extraños, creo que la gente los usa demasiado hoy en día, no es que este asumiendo que la gente miente, pero no creo que sea apropiado decir te amo cuando en verdad lo que tienes es una infatuación hormonal temporal o cosas por el estilo, en fin, quién soy yo para juzgar.
Desde mi punto de vista, no sé si he amado, pero si he querido y extrañado bastante, imagínate que de un día al otro te alejaras de todo lo que conoces y quieres, para ir a un destino que no es el verdadero, y anduvieras deambulando en arena movediza, es difícil no hundirse, pero no puedo permitírmelo, y desafortunadamente cuando hablo contigo me pongo triste, como dices tú, me revuelves la infancia y demás recuerdos de la vida. Te acuerdas cuando éramos chiquitas, agarrábamos cobijas, toallas, sábanas y hacíamos una especie de tienda de campaña en mi cuarto? Bueno, en estos días me recordé de una vez que lo hicimos y agarramos el teléfono y llamamos a quién quiere ser millonario, ceronuevecerocero unosietedos ochoocho ochocho, no sé si el número sigue siendo el mismo, pero a ese fue el que llamamos nosotras, que pillas nos sentíamos no?
No creas que no me recuerdo de esas cosas, pero creo que empiezo a entender a Gabriel cuando se fue y no quería hablar con nadie, a uno se le revuelven las tripas, se le llenan los ojos y le da escalofríos en médula, es inevitable, es inevitable extrañar lo que queríamos.
No creas que no estoy orgullosa de ti, te bañes o no, sé que estás madurando poco a poco, más de lo que tú misma y yo creemos, es increíble todo, te estás convirtiendo en una mujer de coraje por lo que estoy viendo. No creas tampoco que no veo tus fotos, no sabes la mezcla de alegría y nostalgia que me da cada vez que veo fotos nuevas con tu uniforme, o de tus guardias o simplemente en tu nuevo mundo, es fascinante en verdad, vas a ser una gran profesional.
Cuando me meto en tu facebook veo los status que has publicado, las fotos de tu vida reciente, pero no sé, veo que todo el mundo comenta esas fotos, comenta en tu muro y me siento como que ya no hay espacio para mi ahí, para qué estorbar, sino hago falta. Además, nunca me ha gustado demasiado hacer las cosas tan públicas, le quita autenticidad, aunque de que hablo si igual este es un espacio informático libre, directo y totalmente público, pero bueno, creo que nadie revisa esto de todas formas y muchas personas si averiguan tu muro.
Por todo eso creo que me había tardado en responder tu carta, espero que lo entiendas.
Creo que ahora también me provocó iniciar de nuevo mi carta.
Hola joha cómo estás? Por acá todo bien, todo igual. Todavía sigo en el apartamento, el crédito de la casa lo siguen procesando, esperamos que para la semana que viene ya podamos empezar a mudar todas las cosas. Hoy me acordé de ti porque cuando me levanté mami había hecho perico con arepas, cosa que siempre desayunaba cuando me quedaba a dormir en tu casa. Te cuento de las universidades, todas me han aceptado excepto Rice (elitistas esos) y Texas A&M, que estoy esperando la carta, llamé a la universidad y me dijeron que para la semana que viene ya tendría mi respuesta. En verdad quisiera estudiar en A&M, es una muy buena universidad, no es tan cara por qué es pública y queda lo suficientemente lejos de la casa como para vivir alla, pero lo suficientemente cerca como para irse en un viaje en carretera. Suena muy tentador vivir en el campus de la universidad, la comida es mala, las habitaciones peores, pero estás ahí, tu sola, tienes que resolver tu vida como puedas, y quiero eso. Además, suena interesante vivir en una ciudad donde casi todo la gente es de esa misma universidad, una ciudad estudiantil, no suena mal verdad? Ojalá me acepten, ya he ido convenciendo a mis padres para que me dejen vivir allá, creo que están bastante convencidos, pero fue un error, ahora papi va a buscar el correo como 3 veces al día, se emocionó más que yo.
En otras notas más banales, también cuando me levanté me di cuenta de que tenía la pepa más terrible del mundo en la frente, cuando ya me creía grandecita y todo me salió un timbre que no tiene nada que envidiarle a los que me aparecían en 4to. Que desastre todo.
Esta noche iré a ver al conde del guácharo, es increíble la cantidad de venezolanos que hay acá, hay tantos que hasta un show del conde se puede montar.
Creo que eso es todo, en verdad no tengo más que añadir.
Ah, eso, y que también te extraño.
0
Gatos y Perros
Siempre quise tener un perro, me encantan, en verdad me encantan muchos animales, pero no es como si fuese a tener a un canguro de mascota. Los gatos también me encantan, a pesar de que son tan diferentes el uno del otro, digo, los perros son como los novi@s bob@s, los tratas mal y se siguen, siempre quieren cariño y son idiotamente leales, te van a querer no importa lo que les hagas, en pocas palabras son idiotas, incondicionales, y por eso es que a la gente les encantan, en verdad nos encanta la idea de que alguien nos va a querer tanto simplemente por una rascadita detrás de las orejas de vez en cuando y un plato de perrarina.
Los gatos en cambio, representan todo lo que no nos gustan de los humanos, no nos hacen caso, no nos jalan bola, no nos necesitan ni nos quieren, simplemente están ahí por conveniencia, nosotros no somos sus dueños ni nunca lo seremos, ellos se quedan porque saben que van a conseguir comida y casa, pero se pueden ir en cualquier momento sin remordimiento.
Nos gusta que nos jalen bola, que estén detrás de nosotros, que nos quieran incondicionalmente, despreciamos la traición, odiamos querer a alguien que no nos quiere de vuelta. Por eso creo que a mucha gente no le gusta los gatos, dicen que son “odiosos” yo creo que es que son como nosotros mismos, egoístas, mentirosos, traicioneros.
A mí los gatos me encantan, llegué a tener uno, pero nos dio una alergia terrible en la casa, se lo regalamos a alguien que lo adoraba, en una tienda de bicicletas, y vivía con otra serie de gatos en su tienda de bicicletas… bueno esa es otra historia de animales, la que les cuento hoy es otra.
Estaba en la terraza del apartamento (se le puede llamar terraza si es en planta baja?) y empecé a escuchar un maullido, le maullé de vuelta y el gato empezó a maullar más seguido y más fuerte, no sabía de donde venía el sonido, sería del gato del piso de arriba de los franceses? De repente un abominable gato negro me miró con sus penetrantes ojos amarillos mientras salía de los arbustos, como si lo hubiese invitado a tomar té, se metió en el apartamento, cruzó la sala y el comedor y cómodamente se metió debajo de la cama. Le puse un poco de leche pero no le interesaba, la probó y se quedó echado ahí. Al rato la vecina, una señora un poco mayor, lo andaba llamando, le pregunté como era su gato y su descripción coincidió con mi nuevo huésped. Un perrito seguía a la señora por los talones, ella entró igual de frescamente que el gato en el apartamento, y sacó al malhumorado gato de debajo de la cama, nos agradeció salió de la casa, con el gato en brazos y el perrito siguiéndola. Ahí tienen, la diferencia principal entre gatos y perros.
En otra nota, más tarde fuimos a ver nuestra futura casa, de vez en cuando vamos a visitarla, aunque todavía no es oficialmente nuestra, tiene un cartelito de “vendida” al frente, y sabemos que es por nosotros, es reconfortante… es casi perfecta, digo casi, porque lo único que no la hace perfecta es que tenía un hueco en el patio, que se hacía un charco cuando llovía, en verdad no era demasiado grande, pero lo suficiente para hacerla CASI y no perfecta. Descubrimos entonces el origen de ese hueco, cuando estábamos llegando, un conejo salió de una casa vecina, corrió por la calle y se metió a nuestra futura casa. Creo que tendremos que poner una malla en la cerca, a menos de que alguien en la casa quiera tener un conejo mascota, quién sabe…
Los gatos en cambio, representan todo lo que no nos gustan de los humanos, no nos hacen caso, no nos jalan bola, no nos necesitan ni nos quieren, simplemente están ahí por conveniencia, nosotros no somos sus dueños ni nunca lo seremos, ellos se quedan porque saben que van a conseguir comida y casa, pero se pueden ir en cualquier momento sin remordimiento.
Nos gusta que nos jalen bola, que estén detrás de nosotros, que nos quieran incondicionalmente, despreciamos la traición, odiamos querer a alguien que no nos quiere de vuelta. Por eso creo que a mucha gente no le gusta los gatos, dicen que son “odiosos” yo creo que es que son como nosotros mismos, egoístas, mentirosos, traicioneros.
A mí los gatos me encantan, llegué a tener uno, pero nos dio una alergia terrible en la casa, se lo regalamos a alguien que lo adoraba, en una tienda de bicicletas, y vivía con otra serie de gatos en su tienda de bicicletas… bueno esa es otra historia de animales, la que les cuento hoy es otra.
Estaba en la terraza del apartamento (se le puede llamar terraza si es en planta baja?) y empecé a escuchar un maullido, le maullé de vuelta y el gato empezó a maullar más seguido y más fuerte, no sabía de donde venía el sonido, sería del gato del piso de arriba de los franceses? De repente un abominable gato negro me miró con sus penetrantes ojos amarillos mientras salía de los arbustos, como si lo hubiese invitado a tomar té, se metió en el apartamento, cruzó la sala y el comedor y cómodamente se metió debajo de la cama. Le puse un poco de leche pero no le interesaba, la probó y se quedó echado ahí. Al rato la vecina, una señora un poco mayor, lo andaba llamando, le pregunté como era su gato y su descripción coincidió con mi nuevo huésped. Un perrito seguía a la señora por los talones, ella entró igual de frescamente que el gato en el apartamento, y sacó al malhumorado gato de debajo de la cama, nos agradeció salió de la casa, con el gato en brazos y el perrito siguiéndola. Ahí tienen, la diferencia principal entre gatos y perros.
En otra nota, más tarde fuimos a ver nuestra futura casa, de vez en cuando vamos a visitarla, aunque todavía no es oficialmente nuestra, tiene un cartelito de “vendida” al frente, y sabemos que es por nosotros, es reconfortante… es casi perfecta, digo casi, porque lo único que no la hace perfecta es que tenía un hueco en el patio, que se hacía un charco cuando llovía, en verdad no era demasiado grande, pero lo suficiente para hacerla CASI y no perfecta. Descubrimos entonces el origen de ese hueco, cuando estábamos llegando, un conejo salió de una casa vecina, corrió por la calle y se metió a nuestra futura casa. Creo que tendremos que poner una malla en la cerca, a menos de que alguien en la casa quiera tener un conejo mascota, quién sabe…
Recuerdos Materiales
Leía el blog de Joha y me dió una nostalgia terrible cuando vi el post de su cumpleaños favorito. Te pido una disculpa personal Joha por mi torpeza eterna, les confieso que siempre he sido muy torpe y distraída, voy caminando y me caigo porque me enredé yo sola, tengo problemas bajando las escaleras y suelo llevarme las perillas y los bordes de las mesas por delante. La mayoría de la gente que me conoce bien lo sabe, la que no, piensa que en las fiestas estoy borracha porque tropiezo con todo, pero no, no es que estoy etilizada, es que soy torpe por naturaleza, todos los vasos tumbados lo testifican.
Mis cumpleaños en general nunca han sido muy buenos, excepto algunos en los que he viajado que han sido excelentes. Mi cumpleaños casi siempre cae en vacaciones, por lo cual mucha gente se va de viaje y la lista de invitados no es lo mejor que podría haber sido, sin embargo, siempre trato de verle el lado bueno a las cosas y no le presto mucha atención a eso. Recuerdo que cuando estábamos en el colegio la mayoría me decía que quisieran cumplir en vacaciones como yo, ilusos, si lo que yo mas quería es que mi cumpleaños fuese un día de colegio para que me felicitaran todos.
Bah, ahora me doy cuenta de que no tiene nada de especial, que era preferible? que te felicitaran un montón de personas a las que realmente no les importas o los que verdaderamente te aprecian te feliciten en tu día. Voto por la segunda, aunque creo que no tenía otra opción y cuando sales del colegio ya eso no importa porque todo lo anterior no aplica.
Casi se me olvida el propósito de la foto de este post, si la ven es una rana de juguete, que tiene un reloj digital que apenas se ve, nada especial, de plástico, de los que te regalan cuando compras una cajita feliz, si lo tratas de vender en la calle no te darán mas de 2 centavos. Pero para ella esa ranita valía oro, por qué?, pues porque es un recuerdo de un día maravilloso, de esos que no se repiten. Son ese tipo de cosas que normalmente tienes tirado por tu cuarto, en el fondo de una gaveta o en alguna litera o biblioteca pegada a las paredes. Probablemente no los mires mucho, solamente cuando limpies tu cuarto cada 3 meses o empieces a deshacerte de un montón de cosas porque ya tienes demasiados pereques.
Para quienes no saben, yo viví 17 años en la misma ciudad, la misma casa y estudié en el mismo colegio, y ahora llevo 6 meses viviendo en apartamentos alquilados, eso lo explicaré mejor en otro post. La cuestión es que son 6 meses sin tener un cuarto que llamar mío, sin tener esos perequitos en los estantes, sin tener recuerditos que puedas mirar... Creo que en verdad no debería poder quejarme, hay mucha gente que no tiene casa, que no tiene esperanza, que no tiene nada, pero creo que el ser humano es un ser de costumbres, y me acostumbré a vivir con mis jugueticos de cajita feliz, mis peluches, adornitos en los estantes y cientos de recuerdos que no cuestan nada, pero de valor incalculable que ahora me doy cuenta de que me hacen muchísima falta.
Creo que debo aprender a desligarme de los recuerdos materiales...
Subscribe to:
Posts (Atom)